A diferencia de tantos fotógrafos que hacen suya con saturación e hinchando el pecho la condición de artistas, la veterana Sabine Weiss, que está a punto de cumplir 92 años y ha retratado a sus semejantes durante nueve décadas -empezó siendo una niña de 12, capturando los panoramas humanos que veía por la ventana de su cuarto-, no quiere saber nada del asunto. Rechaza tajante que lo suyo sea arte.
"Las fotos deben decirnos algo de la condición humana (...) No me gusta lo espectacular, prefiero la sobriedad", declaró en alguna de las escasas entrevistas que ha concedido sobre su trabajo -no le va teorizar- ejercitando durante casi un siglo una mirada elegante y noble. Nacida en Suiza pero ciudadana francesa, Weiss es la la última reportera viva de la generación de Robert Doisneau, Willy Ronis, Édouard Boubat y Brassaï, el pasmoso grupo de humanistas interesados en mostrar la sobria dignidad de la gente corriente pero fuera de la petulancia de los superestrellas del reportaje.
Se trata de una profesional con una obra inmensa, comparable en cantidad y calidad a la de los mejores fotógrafos del siglo XX, pero que no suele merecer más que unas líneas en los tratados históricos o críticos, acaso por la refracción por la petulancia y la cátedra de Weiss, quien jamás pronunció ninguna acotación académica o declaración de estilo. También quizá por esa actitud es de las más queridas entre sus colegas.
En el poco tiempo libre que lograba disfrutar salía a las calles parisinas de la posguerra y se dedicaba a aprender a ser reportera. También empezó a frecuentar los círculos de la intelectualidad y se hizo amiga, entre otros, de Francis Scott Fitzgerald, Fernand Léger y Alberto Giacometti. A todos los subyugó con su inmediata calidez. Weiss dejó una de las colecciones más amplias de retratos de artistas de los años cincuenta, con fotos de, entre otros y además de los citados, Robert Rauschenberg, Niki de Saint Phalle, Romy Schneider, Ella Fitzgerald, Jeanne Moreau, y Simone Signoret.
La India, Birmania, Egipto... La muestra de París enfatiza el trabajo de Weiss en la década de los años cincuenta, la más prolífica de su carrera, pero muestra también trabajos menos conocidos, como los reportajes que abordó en los ochenta, cuando se permitió recorrer el mundo y retratarlo. Firmó emotivas series documentales en la India, Birmania, Bulgaria, Egipto y la isla de la Reunión. Quiero responder con alegría al diálogo con las personas a las que retrato "Me gusta que mi cámara hable con el modelo y eso, creo, me diferencia de esos otros fotógrafos que prefieren la distancia. Hacer fotos siempre ha sido un placer y también una necesidad, por eso quiero responder con alegría al diálogo con las personas a las que retrato. Mis fotos expresan el amor que siento por la vida", ha señalado como lema de trabajo la última de las fotógrafas de la escuela humanista francesa inmediatamente posterior a la II Guerra Mundial.
Concurso Internacional de fotografía Luis Ferreira Alves
El ‘Concurso Internacional de Fotografía Luis Ferreira Alves | Una mirada contemporánea a la arquitectura’ tiene como objetivo inspirar la creación de una serie fotográfica que transmita de manera efectiva una obra o un conjunto arquitectónico...
Fecha límite de presentación: Hasta el 25-04-2025.
Cuota de inscripción: Gratuita.
Temática del concurso: Arquitectura
Premios:
En un día completamente cubierto, la combinación eficaz de la luz del sol y la del cielo producen una gran fuente luminosa difusa. En los días brumosos pueden tomarse excelentes fotografías...
Los Monochrome Awards están dirigidos principalmente a personas para quienes la fotografía es una pasión y una forma de vida. Estos son los Ganadores de los Monochrome Awards Profesional 2024.
Alfred Eisenstadt. "Encontrar y capturar el momento narrativo"
A diferencia de la mayoría de los fotógrafos de noticias en ese momento que dependían de cámaras de prensa de 4"×5", Eisenstaedt prefería la Leica portátil más pequeña, que le brindaba mayor velocidad y flexibilidad al fotografiar eventos de actualidad o capturar instantáneas de personas en acción. Su objetivo, dijo una vez, era “encontrar y capturar el momento narrativo”...
"La fotografía de paisajes es la prueba suprema del fotógrafo y, a menudo, la decepción suprema". - Ansel Adams.
Ansel Adams entendió que el fotógrafo necesita encontrar un mensaje a través del paisaje y conseguir conectar con él. De esta manera, también lo harán las personas que vean tus fotografías.